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Esta técnica ha sido desarrollada por William Miller y Stephen Rollnick. Este método es ideal para pacientes que ingresan con escasos recursos para el cambio. Se trata de un enfoque no autoritario destinado a ayudar a las personas a que dejen vía libre a sus motivaciones y recursos. Es una técnica poderosa para superar la ambivalencia y ayudar a los pacientes en su motivación hacia el cambio.

 

La familia constituye un sistema en el cual la conducta de cada miembro “encaja” perfectamente con la del resto, conformando una maquinaria familiar que tiende a mantener una homeostasis. En ese sentido, la drogadependencia de un miembro de la familia aparece como una pieza de todo un sistema que funciona favoreciendo la aparición de dicho trastorno, así como su permanencia. De ahí que cambiar una sola parte del sistema (el paciente identificado) será insuficiente si quiere realizarse un cambio real y persistente; para lograr esto, se requiere que todas las partes de la familia (todos los otros miembros-padre, madre, hermanos y otros significativos-) participen de los cambios, modificando cada uno de ellos, los comportamientos que sostienen la enfermedad.

 

Los pensamientos, emociones y conductas se encuentran íntimamente conectados y en constante interjuego. Trabajar sobre las conductas en una primera instancia de tratamiento, a partir de la puesta de límites, y luego sobre los pensamientos y creencias que sostienen la enfermedad se vuelve esencial a la hora de sostener los cambios y prevenir recaídas. Una serie de creencias sobre el sí mismo sostienen imágenes de autoeficacia y autoestima negativas, que deben ser cuestionadas y reemplazadas por otras más verosímiles y positivas. Técnicas específicas como la desensibilización sistemática, el cuestionamiento de creencias a partir del diálogo socrático, la identificación de pensamientos negativos y distorsiones cognitivas y su cambio por pensamientos alternativos, la prevención y exposición de respuesta, y el entrenamiento en habilidades sociales son algunas de las técnicas empleadas.

 

La comunidad terapéutica funciona como una familia sustituta, representando a la sociedad y actuando como modelo de lo que se espera de un  individuo en la sociedad. La casa a la cual asisten los pacientes funciona como modelo de su casa y es responsabilidad de ellos su cuidado y mantenimiento. Al mismo tiempo, los miembros del staff funcionan como padres y madres sustitutos, modelando las conductas, y actuando como modelos del afuera. Las técnicas y grupos específicos de comunidad terapéutica utilizados son: espejos, grupos estáticos, grupos dinámicos, grupos de sentimientos, espalda con espalda, Role-playing.

 

Desarrollada por la Dra. Marsha Linehan, es un desarrollo de la TCC adaptado a las necesidades de las personas que padecen trastorno límite de personalidad. La dialéctica central que atiende es aquella que se da entre aceptación y cambio. Cuenta con un sistema de Entrenamiento en Habilidades adaptable a diversos contextos.

 

Este tratamiento plantea la importancia de la validación del contexto en el cual surgen y se desarrollan las conductas-problema como una parte esencial para aprender y no juzgar ni condenar el accionar de los pacientes y sus familiares. En ese sentido, contextuar cada  pensamiento, emoción y/o conducta ayuda también a modificar la cadena de situaciones que derivan en un consumo

 

Es un método psicológico para tratar dificultades emocionales que fueron causadas por experiencias difíciles en la vida del sujeto (traumas), desde abusos, asaltos, desastres naturales hasta fobias, ataques de pánico o incidentes traumáticos en la infancia. También se usa EMDR para aliviar la angustia de hablar en público, para mejorar el rendimiento en el trabajo, en los deportes y en las interpretaciones artísticas.  EMDR es un método complejo que combina elementos teórico-clínicos de orientaciones tales como la psicodinámica, cognitiva, conductual y rogeriana. Para muchos pacientes EMDR resulta de mayor ayuda para sus problemas que cualquier terapia convencional.